Botox en Treinta y Tres

Antes de empezar un tratamiento de botox, es posible que necesites anestesia, singularmente si sudas mucho o te pones nerviosísimo, si bien las inyecciones no son muy dolorosas.

El botox es una técnica muy segura, sus efectos sólo afectan al músculo. En el caso de inyectarse en un nervio o vaso sanguíneo no habría ningún efecto dañino. El Botox en Treinta y Tres también se usa para el tratamiento de problemas de salud como el ojo fatigado, parpadeo excesivo y espasmos faciales, y se ha demostrado a lo largo de los años ser realmente efectivo contra movimientos musculares involuntarios.

Cuando te has informado bien sobre el Botox en Treinta y Tres, debes evitar efectuarte el tratamiento si estas encinta o dando el pecho, ya que puede afectar al bebe. El botox es una técnica absolutamente segura y también indolora, la cantidad de botox utilizada en casa sesión es mínima, con lo que no es tóxico para nuestro organismo.


El botox es la primera substancia extraída de la toxina botulinum, lo que hace es inmovilizar las funciones del músculo de forma temporal; es una de las más empleadas para quitar las arrugas por los médicos.